Hojas y espinas, ALCONCHEL DE LA ESTRELLA

El destino les había deparado miel y sonrisas, pues Aurora así ya era feliz pese a estar todos perdidos en tierra desconocida. Pero es que no acabaría así la historia, pues Aurora, Beaujour e Ingénu fueron rescatados por los embajadores, quienes navegaron por encontrarse con su futuro rey.
En su tierra de siempre, en adelante Ingénu reinó, con dicha para su gente y felicidad para su familia. Y Aurora jamás volvería a quejarse de sus desgracias, pues había aprendido por experiencia que éstas bien...
Tuvieron suerte esta vez, pues en la tierra donde naufragaron Aurora halló a su hijo desaparecido, Beaujour, en brazos de una misteriosa señora. Ésta les contó que tiempo atrás su marido era pirata, y había raptado al niño. Pero ellos mismos también habían naufragado y tanto ella como el pequeño habían logrado salvar la vida.
Y pasó el tiempo, hasta cuatro años, y Fourbin murió de desdicha y locura, pues tal era la crueldad de su esposa Aimée, que ni él mismo pudo soportarla. Los habitantes del reino expulsaron a Aimée de sus tierras, y enseguida fueron en busca de Ingénu para proclamarlo su nuevo rey. Tras la visita de los embajadores a Ingénu ofreciéndole el trono, éste, su esposa Aurora y la pastora se embarcaron de vuelta a casa. Pero no todo podía salir según lo previsto, y el infortunio los abordó de manera tal...
Ingénu se puso enseguida al servicio de su nuevo rey, e hizo uso de su valía y destreza en el combate para acabar con el Comandante de los enemigos del reino. Muerto el mandamás, sus tropas huyeron despavoridas. El monarca se mostró tan agradecido que adoptó a Ingénu como hijo propio, en vistas de que no tenía vástagos.
De vuelta a la corte, Fourbin ordenó a sus sirvientes que le llevasen retratos de mujeres hermosas del reino, pues ahora estaba ávido por contraer matrimonio con alguien. La casualidad, el destino, o como quieran llamarlo, hizo que Fourbin se embelesase con la imagen de Aimée, la hermana de Aurora.
Pasó un año entero, y Aurora entretanto tuvo un niño: Beaujour. A pesar de los cuidados y atenciones que sobre él su madre tenía, un día desapareció, algo que apesadumbró profundamente a Aurora e Ingénu....