Menudos "esmorrones" nos hemos pegado en esta cuesta con las bicicletas. A ver si alguien se acuerda, cogiamos la cuesta desde arriba y como hasta hace un año la cuesta bajaba derechita hasta abajo, bajabamos a toda (como decirlo sin que suene mal)LECHE, los mas espabilados torcian para la izquierda, el resto nos estampabamos contra la tapia de la abuela Torda. Por entonces solo tenian frenos las mas nuevas, como yo aprendi con la bici de mi primo Angel tuve que aprender a frenar con la zapatilla parando la rueda trasera. Para cuando mi hermana se decidió a dejarme la bici nueva, yo ya habia jurado no volver a montar en bici.
Un besito de la Tordilla.
Un besito de la Tordilla.