Luz ahora 0,10518 €/kWh
Buenos días a todos:
Muy bien lo de la iluminación de las calles.
Cuando era pequeño, recuerdo que habrían quince ó veinte bombillas, situadas extratégicamente por las zonas del pueblo, para dar la sensación de más ó menos iluminación. Entonces había mucha gente y siempre podías encontrar a alguien por la calle, incluso a horas intempestivas.
Cuando los mayores salían de ronda, solía -fallar- alguna bombilla, normalmente si quedaba cerca de la casa de la chica que rondaba. También -aparecían- fantasmas que asustaban a la gente. Iban cubiertos con grandes sábanas blancas. Que les pregunten a mi primo Anselmete y a José Mª, el de la Urbana. Que tuvo que acompañarlos mi padre a sus casas, porque no se atrevían a bajar al barrio abajo, se les había aparecido -una- fantasma.
Me gustaba entonces el pueblo, por la cantidad de gente que había, todas las casas habitadas y con una media de cinco ó seis personas. Mínimo. Ahora no me gusta ver las casas cerradas. Menos mal que en verano se anima y cambia el panorama.
Venga, un abrazo para los chicos y besos para las chicas, como dice mi primo Gabi.
Efra7.
Muy bien lo de la iluminación de las calles.
Cuando era pequeño, recuerdo que habrían quince ó veinte bombillas, situadas extratégicamente por las zonas del pueblo, para dar la sensación de más ó menos iluminación. Entonces había mucha gente y siempre podías encontrar a alguien por la calle, incluso a horas intempestivas.
Cuando los mayores salían de ronda, solía -fallar- alguna bombilla, normalmente si quedaba cerca de la casa de la chica que rondaba. También -aparecían- fantasmas que asustaban a la gente. Iban cubiertos con grandes sábanas blancas. Que les pregunten a mi primo Anselmete y a José Mª, el de la Urbana. Que tuvo que acompañarlos mi padre a sus casas, porque no se atrevían a bajar al barrio abajo, se les había aparecido -una- fantasma.
Me gustaba entonces el pueblo, por la cantidad de gente que había, todas las casas habitadas y con una media de cinco ó seis personas. Mínimo. Ahora no me gusta ver las casas cerradas. Menos mal que en verano se anima y cambia el panorama.
Venga, un abrazo para los chicos y besos para las chicas, como dice mi primo Gabi.
Efra7.