CARACENA:
(Caracena - Carrascosa de Abajo: 5 Km.)
Uno de los lugares de más bello emplazamiento de la provincia de Soria, donde casi todo es pasado.
Es un lugar muy atractivo especialmente por su soledad. En invierno solamente viven dos pastores, en verano poco más. Pero la riqueza monumental es grande. Desde la hoz te ha sorprendido contemplar el ábisde de la iglesia de Santa María. En la placeta, junto a una fuente de agua potabilísima, se levanta un esbelto rollo renacentista, fechado en 1.538, de muy buena factura y conservación. Junto al rollo el olmo que aun quiere reverdecer.
Subiendo hacia la iglesia de San Pedro queda a la izquierda el torreón de la cárcel cuya robustez ha impedido su ruina. A lo largo de la calle van quedando las ruinas de los antiguos esplendores. En lo alto de la población se encuentran la restaurada iglesia de San Pedro, románica, con la torre sobre el ábside que adorna con canes históricos. La galería porticada, con sus historiados capiteles en los que se representan escenas de la vida de Cristo y combates medievales, proporcionaba lugar abrigado a la corporación rural, donde los cabezas de familia trataban las cuestiones que afectaban al gobierno del pueblo y a la justa aplicación de los fueros.
Caracena tiene un castillo por corona pues se alza sobre una plataforma rocosa entre dos precipicios en la parte más alta de la villa por donde la plataforma rocosas se estrecha. Los restos más antiguos son de los siglos XII - XIII aunque las trazas actuales pertenencen a finales el siglo XV, cuando Alfonso Carrillo de Acuña adquierre el señorío de Caracena.
Todo Caracena es una ruina abandonada donde se percibe el rancio y antiguo esplendor que parece esperar mejores tiempos.
Una última cuestión para el caminante conquense: ¿Se repoblarían las Caracena y Caracenilla de la Alcarria conquense con pobladores de esta Caracena soriana?
El único acceso a Caracena lo constituye la carreterilla que vamos a tomar. DEjas a tu izquierda el último esplendor de Caracena: una ermita que parece iglesia mayor. Abandonas las últimas buitreras. Llevando el río a tu derecha sigues su curso de altos chopos y de verdes huertos.
(Caracena - Carrascosa de Abajo: 5 Km.)
Uno de los lugares de más bello emplazamiento de la provincia de Soria, donde casi todo es pasado.
Es un lugar muy atractivo especialmente por su soledad. En invierno solamente viven dos pastores, en verano poco más. Pero la riqueza monumental es grande. Desde la hoz te ha sorprendido contemplar el ábisde de la iglesia de Santa María. En la placeta, junto a una fuente de agua potabilísima, se levanta un esbelto rollo renacentista, fechado en 1.538, de muy buena factura y conservación. Junto al rollo el olmo que aun quiere reverdecer.
Subiendo hacia la iglesia de San Pedro queda a la izquierda el torreón de la cárcel cuya robustez ha impedido su ruina. A lo largo de la calle van quedando las ruinas de los antiguos esplendores. En lo alto de la población se encuentran la restaurada iglesia de San Pedro, románica, con la torre sobre el ábside que adorna con canes históricos. La galería porticada, con sus historiados capiteles en los que se representan escenas de la vida de Cristo y combates medievales, proporcionaba lugar abrigado a la corporación rural, donde los cabezas de familia trataban las cuestiones que afectaban al gobierno del pueblo y a la justa aplicación de los fueros.
Caracena tiene un castillo por corona pues se alza sobre una plataforma rocosa entre dos precipicios en la parte más alta de la villa por donde la plataforma rocosas se estrecha. Los restos más antiguos son de los siglos XII - XIII aunque las trazas actuales pertenencen a finales el siglo XV, cuando Alfonso Carrillo de Acuña adquierre el señorío de Caracena.
Todo Caracena es una ruina abandonada donde se percibe el rancio y antiguo esplendor que parece esperar mejores tiempos.
Una última cuestión para el caminante conquense: ¿Se repoblarían las Caracena y Caracenilla de la Alcarria conquense con pobladores de esta Caracena soriana?
El único acceso a Caracena lo constituye la carreterilla que vamos a tomar. DEjas a tu izquierda el último esplendor de Caracena: una ermita que parece iglesia mayor. Abandonas las últimas buitreras. Llevando el río a tu derecha sigues su curso de altos chopos y de verdes huertos.