¿Qué me decís de el cazo con patas que se ve en la fot?
Con uno como ese, tostaba yo el azúcar para hacerme después unos estupendos "Pirulís". Mientras se tostaba el azúcar a fuego lento, se hacía un cucurucho de papel y la parte inferior, o más delgada, se introducía en la boca de una botella asegurándose de que estaba bien colocado. Cuando el azúcar estaba tostada se vacíaba dentro del cucurucho, con mucho cuidado de que no te cayese una gota encima -quemaba que te morías- Cuando el azúcar tostado se espesaba un poco se ponía en el centro "un palote" que anteriormente habíamos cortado de un chaparro del corral y lo habíamos pelado y cortedo a la medida con una navajilla.
Estos "Pirulís", si no eras muy "husmo", te podían durar una semana, si sólo comías "al recreo" o en el trayecto de tu casa a la escuela y viceversa. Si por el contrario eras "husmo" y tragaldabas, te lo comías en menos que canta un gallo. Para mí, lo mejor era rechupetearlo hasta que no quedaba ni miga ni totera. Jajajajajaja
Con uno como ese, tostaba yo el azúcar para hacerme después unos estupendos "Pirulís". Mientras se tostaba el azúcar a fuego lento, se hacía un cucurucho de papel y la parte inferior, o más delgada, se introducía en la boca de una botella asegurándose de que estaba bien colocado. Cuando el azúcar estaba tostada se vacíaba dentro del cucurucho, con mucho cuidado de que no te cayese una gota encima -quemaba que te morías- Cuando el azúcar tostado se espesaba un poco se ponía en el centro "un palote" que anteriormente habíamos cortado de un chaparro del corral y lo habíamos pelado y cortedo a la medida con una navajilla.
Estos "Pirulís", si no eras muy "husmo", te podían durar una semana, si sólo comías "al recreo" o en el trayecto de tu casa a la escuela y viceversa. Si por el contrario eras "husmo" y tragaldabas, te lo comías en menos que canta un gallo. Para mí, lo mejor era rechupetearlo hasta que no quedaba ni miga ni totera. Jajajajajaja