Nana de las horas y las campanas (Navidad)
En el mar de tu cuerpo se encendió la noche oscura y por tus venas caleteaban los barquitos de mis sueños.
Los relojes de arena de los puertos bajaron a dormir sobre la playa.
Duerme en la Nochebuena, mi amor, que en lugar de horas hay estrellas y en vez de turrones, campanas.
En el mar de tu cuerpo se encendió la noche oscura y por tus venas caleteaban los barquitos de mis sueños.
Los relojes de arena de los puertos bajaron a dormir sobre la playa.
Duerme en la Nochebuena, mi amor, que en lugar de horas hay estrellas y en vez de turrones, campanas.