"2005-03-22 12:21:07 Hay quien está en todo los foros Hay alguien detrás de esta ventana, que sea de mi especie, y que se acuerde de un gran personaje como era el TIO BARTOLO aquel señor que con su borriquito iba vendiendo todo lo que las buenas mozas necesitaban para el pelo. La aguja y el dedal. EL QUE NO TIENE NOMBRE"
"2005-03-22 18:08:26 Sí, cierto ¡parece que no tiene nada más que hacer! Ja, ja, ja,
Bueno yo no me acuerdo del TIO BARTOLO, (seguro que habrá alguien además de tí, que sí se acuerde) pero,,, sí que he oído hablar del BORRICO DEL TIO BARTOLO. De quien si me acuerdo es del COMINERO. Solía hospedarse en la posada que había en la C/ Yedra (Emiliano) Llegaba cargado de saquitos de especias; alcarabea, canela, clavo, orégano, pimentón picante, pimentón dulce (pimentón de Murcia) decía él. Era una delicia ponerse a su lado pues siempre desprendía buen olor a esa mezcla de especias que las mujeres del pueblo compraban, sobre todo en la época en que se hacían las matanzas. Milagros"
Bueno yo no me acuerdo del TIO BARTOLO, (seguro que habrá alguien además de tí, que sí se acuerde) pero,,, sí que he oído hablar del BORRICO DEL TIO BARTOLO. De quien si me acuerdo es del COMINERO. Solía hospedarse en la posada que había en la C/ Yedra (Emiliano) Llegaba cargado de saquitos de especias; alcarabea, canela, clavo, orégano, pimentón picante, pimentón dulce (pimentón de Murcia) decía él. Era una delicia ponerse a su lado pues siempre desprendía buen olor a esa mezcla de especias que las mujeres del pueblo compraban, sobre todo en la época en que se hacían las matanzas. Milagros"
Las "chicas" de mi edad se deben acordar de aquellos costureros de mimbre, forrados con telas floreadas donde poníamos "nuestras labores", que a decir verdad, a algunas chicas no les gustaba para nada "tocar" una aguja.
A falta de los costureros de mimbre, también se hacían servir como tales, esportillas hechas de pleíta, canastillas, o a las malas, malas, un lata vacía de carne de membrillo ¡Ay, el membrillo! Sólo con nombrarlo se me hace la boca agua. Si ahora tuviese en la nevera, no os quepa la menor duda, que me levantaba ahora mismo, y me hacía un "cacho" pan bien untado, para merendar...
A falta de los costureros de mimbre, también se hacían servir como tales, esportillas hechas de pleíta, canastillas, o a las malas, malas, un lata vacía de carne de membrillo ¡Ay, el membrillo! Sólo con nombrarlo se me hace la boca agua. Si ahora tuviese en la nevera, no os quepa la menor duda, que me levantaba ahora mismo, y me hacía un "cacho" pan bien untado, para merendar...