Abril, de las aguas mil
¡Señor, qué calles, que aceras!
Pero dime, ¿Va de veras
o son téminos de Abril?
Pues sí, cuando yo era pequeña, allá por los años cincuenta, cuando llovía en el pueblo, y en abril suele hacerlo, en verano por el polvo de las calles, y en invierno cuando se deshacían los hielos o la nieve, se formaban unos barrizales de no te menees; por eso, en el portal o entradas de muchas casas, se ponía una estera hecha con pleíta de esparto, para ir restregándote los pies en ella y quitarte el barro antes de entrar, aunque no pusiera en letras bien grandes: Bienvenido, o Welcome Jajajaja.
¡Señor, qué calles, que aceras!
Pero dime, ¿Va de veras
o son téminos de Abril?
Pues sí, cuando yo era pequeña, allá por los años cincuenta, cuando llovía en el pueblo, y en abril suele hacerlo, en verano por el polvo de las calles, y en invierno cuando se deshacían los hielos o la nieve, se formaban unos barrizales de no te menees; por eso, en el portal o entradas de muchas casas, se ponía una estera hecha con pleíta de esparto, para ir restregándote los pies en ella y quitarte el barro antes de entrar, aunque no pusiera en letras bien grandes: Bienvenido, o Welcome Jajajaja.