Llega un doctor y le pregunta a su enfermera:
Enfermera, ¿despertó ya el paciente de la recamara 311?
Y la enfermera le responde:
Sí doctor.
El doctor le dice a la enfermera:
¿Le platicó lo sucedido?
La enfermera responde:
No doctor, prefiero que lo haga usted.
Llega el doctor y le dice al paciente:
Disculpe, tengo que darle dos noticias, una buena y una mala.
Y el paciente le dice:
Deme la mala primero.
El doctor le dice:
Nos equivocamos y le amputamos la mano sana.
El paciente indignado le responde:
¿Qué? ¿Cuál es la buena noticia?
Y el doctor le responde:
Que la otra mano no se la vamos a tener que amputar, porque se le va a caer sola.
Enfermera, ¿despertó ya el paciente de la recamara 311?
Y la enfermera le responde:
Sí doctor.
El doctor le dice a la enfermera:
¿Le platicó lo sucedido?
La enfermera responde:
No doctor, prefiero que lo haga usted.
Llega el doctor y le dice al paciente:
Disculpe, tengo que darle dos noticias, una buena y una mala.
Y el paciente le dice:
Deme la mala primero.
El doctor le dice:
Nos equivocamos y le amputamos la mano sana.
El paciente indignado le responde:
¿Qué? ¿Cuál es la buena noticia?
Y el doctor le responde:
Que la otra mano no se la vamos a tener que amputar, porque se le va a caer sola.