"Contando por los ronzales los burros están cabales".
Es frecuente en la vida deducir una cosa de otra, inferir algo que está claramente manifestado en lo primero. Pero no siempre es signo de sagacidad hacer tales deducciones, unas por perogrulladas, otras por falsas y mal deducidas. El refrán se queja de eso, de la necedad de inferir cosas que son lógicas y que sólo plantearlas indica torpeza, descuido o poca atención como pudiera ser el caso de quien en vez de contar los burros por si alguno se ha escapado o lo han robado, contara sólo los ronzales. También se suele aplicar ante la consideración o planteamiento de ciertos efectos que, juzgados por sí mismos y a simple vista, sin necesidad de complicaciones laboriosas, nos llevan al conocimiento de las causas. Sarcástica e irónicamente se dice en los momentos en que se quiere saber si falta alguno en una reunión, asamblea o grupo de amigos, para indicar que no falta nadie.
Es frecuente en la vida deducir una cosa de otra, inferir algo que está claramente manifestado en lo primero. Pero no siempre es signo de sagacidad hacer tales deducciones, unas por perogrulladas, otras por falsas y mal deducidas. El refrán se queja de eso, de la necedad de inferir cosas que son lógicas y que sólo plantearlas indica torpeza, descuido o poca atención como pudiera ser el caso de quien en vez de contar los burros por si alguno se ha escapado o lo han robado, contara sólo los ronzales. También se suele aplicar ante la consideración o planteamiento de ciertos efectos que, juzgados por sí mismos y a simple vista, sin necesidad de complicaciones laboriosas, nos llevan al conocimiento de las causas. Sarcástica e irónicamente se dice en los momentos en que se quiere saber si falta alguno en una reunión, asamblea o grupo de amigos, para indicar que no falta nadie.