CHISTECILLOS PARA REÍR.
Primera Situación:
Un hombre casado tenía un lío con su secretaria.
Un día, la pasión los desbordó y se fueron a la casa de ella; exhaustos
debido a una tarde de sexo desenfrenado, se durmieron, despertando a las
ocho de la tarde.
Cuando el hombre se estaba poniendo la ropa, le pidió a la mujer que sacara
sus zapatos y los ensuciara con césped y tierra. Aunque intrigada ella lo
hizo; él se puso los zapatos, cogió el coche y se fue a su casa.
- ¿Dónde has estado? -le preguntó su mujer cuando entró.
-Querida, no puedo mentirte: estoy enrollado con mi secretaria y estuvimos
toda la tarde haciendo el amor. Me dormí y no desperté hasta las 8.
Su esposa mira hacia abajo, ve sus zapatos y le dice:
- ¡Mentiroso bastardo! ¡Estuviste jugando al golf!".
Primera Situación:
Un hombre casado tenía un lío con su secretaria.
Un día, la pasión los desbordó y se fueron a la casa de ella; exhaustos
debido a una tarde de sexo desenfrenado, se durmieron, despertando a las
ocho de la tarde.
Cuando el hombre se estaba poniendo la ropa, le pidió a la mujer que sacara
sus zapatos y los ensuciara con césped y tierra. Aunque intrigada ella lo
hizo; él se puso los zapatos, cogió el coche y se fue a su casa.
- ¿Dónde has estado? -le preguntó su mujer cuando entró.
-Querida, no puedo mentirte: estoy enrollado con mi secretaria y estuvimos
toda la tarde haciendo el amor. Me dormí y no desperté hasta las 8.
Su esposa mira hacia abajo, ve sus zapatos y le dice:
- ¡Mentiroso bastardo! ¡Estuviste jugando al golf!".