ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Comentario...

Comentario

Schönberg y discípulos
Schönberg, de pie, con el cuarteto Kolisch fundado por su discípulo Rudolf Kolisch. En el fondo, el compositor Alban Berg, también discípulo de Schönberg.

Schönberg ideó el sistema dodecafónico como alternativa para la composición. En su sistema, las doce notas de la escala cromática tienen todas el mismo valor y función y se combinan de acuerdo con ciertas reglas que aseguran esa igualdad, impidiendo que ningún sonido se imponga sobre los demás convirtiéndose en centro tonal (tónica) de la música.

Cada obra dodecafónica parte de una ordenación particular de las doce notas, llamada «serie», fijada previamente por el compositor. De ahí el nombre dodecafónico (doce notas) o serial, como también es conocido.

Las melodías y los acordes se forman con las notas que ofrece esa serie, respetando el orden de aparición previamente fijado y sin evitar las disonancias.

Las Cinco piezas para piano, op. 23, fueron compuestas por Schönberg en 1923. Forman un conjunto equilibrado y fluido.

La primera pieza es contrapuntística, según el modelo barroco. La tercera, un nocturno, y la quinta, un vals, que se diluye en susurros. El carácter tranquilo de estas piezas contrasta con dos scherzos, de carácter explosivo y caprichoso, que corresponden a la segunda y cuarta piezas.

Solo la última de las Cinco piezas está construida, como pide la técnica dodecafónica, sobre una serie completa, es decir, que incluye las doce notas de la escala cromática.