Carta a Juan Andrés Buedo
Desde UPyD Cuenca esperamos que los responsables políticos
en Sanidad de la Provincia de Cuenca y de nuestra CC AA,
rebatan, aclaren o clarifiquen para que fin son tomadas las
medidas incluidas en este escrito y que fundamento tienen las
situaciones y escenarios creados que minoran la capacidad de
atención a pacientes eliminando garantías y tratamientos
médicos y obstruyendo o colapsando servicios.
Esta carta ha sido recibida por Juan Andrés Buedo, miembro de
UPyD C uenca y de la Ejecutiva Regional de UPyD en C astilla la
Mancha.
Hemos preferido remitirla íntegramente para respetar la
redacción del autor para que nuestra consideración política no
empañe su contenido. Son los propios los profesionales de la
materia los más autorizados para contarnos la realidad sin tintes
ideológicos ni partidistas. Si existen más datos u otras versiones
estamos abiertos a su conocimiento y difusión.
Es la primera de las misivas que se recibe como el interesado
hace constar en su final, por lo que contamos con sucesivos
escritos que haremos llegar a la opinión pública.
Gracias a Juan Jesús Ignacio del Río (Patólogo del Hospital
Virgen de la Luz de Cuenca)
CARTILLA SANITARIA
Carta a Juan Andrés Buedo (UPyD Cuenca)
Estimado Sr. Buedo:
Comienzo disculpándome por la tardanza de éste escrito. Cosas
del trabajo…
Quisiera describir de forma cronológica, los cambios y
actuaciones que venimos “sufriendo” en nuestro Hospital de
Cuenca desde la llegada del ínclito nuevo Director Gerente con
instrucciones claras desde la Consejería de Sanidad del Gobierno
Regional. Estas órdenes, enmarcadas muchas de ellas en la Ley
1/2012 y las instrucciones que la desarrollan, abarcan decisiones
en el ámbito organizativo y de recursos humanos y materiales
que van mucho más allá de de un mero “ajuste” sin afectación
de la calidad asistencial. Naturalmente éste es el mensaje oficial.
No quiero extenderme más y comienzo con los datos:
1. El aumento de la jornada laboral implica, de manera directa,
la disminución de la plantilla de los profesionales sanitarios
exclusivamente (Médicos, Enfermeros/as, y Técnicos Auxiliares y
Especialistas), despidiéndose, al término de contratos, muchos
de dichos profesionales. Ello, como es lógico, afecta
directamente a la calidad asistencial dado que la redistribución
del trabajo implica mayor carga laboral en cada uno de dichos
profesionales.
2. Cierre de planta de hospitalización, disolviendo de “facto” la
Unidad de Corta Estancia de Medicina Interna ubicada en dicha
planta, aduciendo que “en un hospital de agudos, la corta
estancia debe ser el objetivo de todas las unidades”, desvelando
con ello la ignorancia supina o la desfachatez más vergonzante
de nuestro Gerente. La razón de dicho cierre, en su opinión, se
debe a que el índice de ocupación del Hospital, permite dicha
medida. Lo cierto es que dicha medida ha provocado que, en
éstos momentos, existe una media de 17 habitaciones con triple
cama, cuando fueron dimensionadas para un máximo de dos.
Esta situación vulnera no sólo el derecho a la intimidad y secreto
profesional sino que impide un correcto desarrollo de la actividad
médica y de enfermería, poniendo en peligro la posibilidad de
recurrir a métodos de emergencia ya que no es posible ubicar
correctamente los “carros de parada cardiaca”. Imagínese una
habitación con tres camas, a las 4 de la mañana, con una
emergencia en uno de los pacientes, sin que se le pueda atender
adecuadamente. ¿A quién habría de culpar entonces?
3. Como seguramente sabrá, éste Hospital ha tenido
últimamente y sigue teniendo, problemas de desabastecimiento
de fármacos de primera línea, incluyendo fármacos oncológicos,
debido a la falta de pago a determinadas empresas
farmacéuticas. En éste sentido los Sindicatos Médicos tuvimos
que poner en conocimiento de la prensa no hace mucho dicha
eventualidad, consiguiendo que la Gerencia se pusiera “las
pilas”, teniendo en cuenta que dicho desabastecimiento sólo
ocurría en ésta Área Sanitaria, de toda Castilla La Mancha.
Actualmente sigue habiendo problemas con reservas escasas al
borde del desabastecimiento.
4. Se han disminuido los refuerzos de personal de Urgencias,
sobrecargando al personal de la misma, poniendo en riesgo la
salud de los pacientes.
5. Inexistencia de interlocución con los representantes de los
trabajadores y de la Junta de Personal, órgano colegiado creado
precisamente creado para ello.
6. Disminución de la cartera de servicios del Servicio de Medicina
Nuclear, obligando a los pacientes de cáncer de Tiroides
susceptibles de necesitar dicho servicio a acudir a otras unidades
de nuestra región, causando mayor incertidumbre y dolor a
pacientes y familiares, además de desconectar al equipo médico
que propició su diagnóstico, con el que llevará su tratamiento,
amén del seguimiento de dicho paciente.
A continuación le expongo las AMENAZAS que pesan sobre el
propio Hospital y su cartera de servicios, así como del Área
Sanitaria de Cuenca en virtud de datos recogidos en los Servicios
Centrales de manera confidencial pero que se empiezan a
cumplir:
• Pérdida de especialidades quirúrgicas: Cirugía Vascular y
Cirugía Maxilo-facial
• Pérdida en todo o en parte de la cartera de servicios de
Análisis Clínicos, Radiodiagnóstico y Anatomía Patológica
• Cierre de varias plantas de hospitalización adicionales a la ya
cerrada.
• Pérdida de las zonas básicas de Sisante, San Clemente,
Casasimarro y de Iniesta que pasarán a depender de los
Hospitales “condenados” a la gestión privada.
• Pérdida de la zona de Tarancón que puede pasar a depender
del Hospital del Suroeste de Madrid.
Todo ello va encaminado a desmantelar nuestro Hospital y
adelgazar el Área Sanitaria con el objeto de hacerla
desaparecer. Según parece existe el plan de reorganizar la
Comunidad en 3 ó 4 Áreas Sanitarias regidas por Hospitales de
gestión directa rodeados por Hospitales de gestión indirecta en
manos de empresas privadas con ánimo de lucro. Naturalmente,
los Hospitales de gestión pública tendrán que admitir a los
pacientes más “costosos” que, con excusas más o menos
válidas, serán trasladados desde los de gestión indirecta. Esa es
la clave.
Con ello, Cuenca, se convertiría en la primera Capital que se
queda sin Hospital Provincial. Además hay que tener en cuenta
que el desmantelamiento de la primera “empresa” de la Ciudad
conlleva el hundimiento comercial y social de la misma. Cuenca
volvería al ostracismo.
Seguramente me dejo cosas en el tintero pero valga de anticipo.
Me pongo a su disposición y le ruego que, en una próxima
plataforma cívica, con vocación de aunar esfuerzos, podamos
contar con su colaboración. Agradezco su atención y cuantas
acciones pudiera acometer en defensa de Cuenca y sus
potencialidades. Atentamente,
Juan Jesús Ignacio del Río
Patólogo del Hospital Virgen de la Luz
Desde UPyD Cuenca esperamos que los responsables políticos
en Sanidad de la Provincia de Cuenca y de nuestra CC AA,
rebatan, aclaren o clarifiquen para que fin son tomadas las
medidas incluidas en este escrito y que fundamento tienen las
situaciones y escenarios creados que minoran la capacidad de
atención a pacientes eliminando garantías y tratamientos
médicos y obstruyendo o colapsando servicios.
Esta carta ha sido recibida por Juan Andrés Buedo, miembro de
UPyD C uenca y de la Ejecutiva Regional de UPyD en C astilla la
Mancha.
Hemos preferido remitirla íntegramente para respetar la
redacción del autor para que nuestra consideración política no
empañe su contenido. Son los propios los profesionales de la
materia los más autorizados para contarnos la realidad sin tintes
ideológicos ni partidistas. Si existen más datos u otras versiones
estamos abiertos a su conocimiento y difusión.
Es la primera de las misivas que se recibe como el interesado
hace constar en su final, por lo que contamos con sucesivos
escritos que haremos llegar a la opinión pública.
Gracias a Juan Jesús Ignacio del Río (Patólogo del Hospital
Virgen de la Luz de Cuenca)
CARTILLA SANITARIA
Carta a Juan Andrés Buedo (UPyD Cuenca)
Estimado Sr. Buedo:
Comienzo disculpándome por la tardanza de éste escrito. Cosas
del trabajo…
Quisiera describir de forma cronológica, los cambios y
actuaciones que venimos “sufriendo” en nuestro Hospital de
Cuenca desde la llegada del ínclito nuevo Director Gerente con
instrucciones claras desde la Consejería de Sanidad del Gobierno
Regional. Estas órdenes, enmarcadas muchas de ellas en la Ley
1/2012 y las instrucciones que la desarrollan, abarcan decisiones
en el ámbito organizativo y de recursos humanos y materiales
que van mucho más allá de de un mero “ajuste” sin afectación
de la calidad asistencial. Naturalmente éste es el mensaje oficial.
No quiero extenderme más y comienzo con los datos:
1. El aumento de la jornada laboral implica, de manera directa,
la disminución de la plantilla de los profesionales sanitarios
exclusivamente (Médicos, Enfermeros/as, y Técnicos Auxiliares y
Especialistas), despidiéndose, al término de contratos, muchos
de dichos profesionales. Ello, como es lógico, afecta
directamente a la calidad asistencial dado que la redistribución
del trabajo implica mayor carga laboral en cada uno de dichos
profesionales.
2. Cierre de planta de hospitalización, disolviendo de “facto” la
Unidad de Corta Estancia de Medicina Interna ubicada en dicha
planta, aduciendo que “en un hospital de agudos, la corta
estancia debe ser el objetivo de todas las unidades”, desvelando
con ello la ignorancia supina o la desfachatez más vergonzante
de nuestro Gerente. La razón de dicho cierre, en su opinión, se
debe a que el índice de ocupación del Hospital, permite dicha
medida. Lo cierto es que dicha medida ha provocado que, en
éstos momentos, existe una media de 17 habitaciones con triple
cama, cuando fueron dimensionadas para un máximo de dos.
Esta situación vulnera no sólo el derecho a la intimidad y secreto
profesional sino que impide un correcto desarrollo de la actividad
médica y de enfermería, poniendo en peligro la posibilidad de
recurrir a métodos de emergencia ya que no es posible ubicar
correctamente los “carros de parada cardiaca”. Imagínese una
habitación con tres camas, a las 4 de la mañana, con una
emergencia en uno de los pacientes, sin que se le pueda atender
adecuadamente. ¿A quién habría de culpar entonces?
3. Como seguramente sabrá, éste Hospital ha tenido
últimamente y sigue teniendo, problemas de desabastecimiento
de fármacos de primera línea, incluyendo fármacos oncológicos,
debido a la falta de pago a determinadas empresas
farmacéuticas. En éste sentido los Sindicatos Médicos tuvimos
que poner en conocimiento de la prensa no hace mucho dicha
eventualidad, consiguiendo que la Gerencia se pusiera “las
pilas”, teniendo en cuenta que dicho desabastecimiento sólo
ocurría en ésta Área Sanitaria, de toda Castilla La Mancha.
Actualmente sigue habiendo problemas con reservas escasas al
borde del desabastecimiento.
4. Se han disminuido los refuerzos de personal de Urgencias,
sobrecargando al personal de la misma, poniendo en riesgo la
salud de los pacientes.
5. Inexistencia de interlocución con los representantes de los
trabajadores y de la Junta de Personal, órgano colegiado creado
precisamente creado para ello.
6. Disminución de la cartera de servicios del Servicio de Medicina
Nuclear, obligando a los pacientes de cáncer de Tiroides
susceptibles de necesitar dicho servicio a acudir a otras unidades
de nuestra región, causando mayor incertidumbre y dolor a
pacientes y familiares, además de desconectar al equipo médico
que propició su diagnóstico, con el que llevará su tratamiento,
amén del seguimiento de dicho paciente.
A continuación le expongo las AMENAZAS que pesan sobre el
propio Hospital y su cartera de servicios, así como del Área
Sanitaria de Cuenca en virtud de datos recogidos en los Servicios
Centrales de manera confidencial pero que se empiezan a
cumplir:
• Pérdida de especialidades quirúrgicas: Cirugía Vascular y
Cirugía Maxilo-facial
• Pérdida en todo o en parte de la cartera de servicios de
Análisis Clínicos, Radiodiagnóstico y Anatomía Patológica
• Cierre de varias plantas de hospitalización adicionales a la ya
cerrada.
• Pérdida de las zonas básicas de Sisante, San Clemente,
Casasimarro y de Iniesta que pasarán a depender de los
Hospitales “condenados” a la gestión privada.
• Pérdida de la zona de Tarancón que puede pasar a depender
del Hospital del Suroeste de Madrid.
Todo ello va encaminado a desmantelar nuestro Hospital y
adelgazar el Área Sanitaria con el objeto de hacerla
desaparecer. Según parece existe el plan de reorganizar la
Comunidad en 3 ó 4 Áreas Sanitarias regidas por Hospitales de
gestión directa rodeados por Hospitales de gestión indirecta en
manos de empresas privadas con ánimo de lucro. Naturalmente,
los Hospitales de gestión pública tendrán que admitir a los
pacientes más “costosos” que, con excusas más o menos
válidas, serán trasladados desde los de gestión indirecta. Esa es
la clave.
Con ello, Cuenca, se convertiría en la primera Capital que se
queda sin Hospital Provincial. Además hay que tener en cuenta
que el desmantelamiento de la primera “empresa” de la Ciudad
conlleva el hundimiento comercial y social de la misma. Cuenca
volvería al ostracismo.
Seguramente me dejo cosas en el tintero pero valga de anticipo.
Me pongo a su disposición y le ruego que, en una próxima
plataforma cívica, con vocación de aunar esfuerzos, podamos
contar con su colaboración. Agradezco su atención y cuantas
acciones pudiera acometer en defensa de Cuenca y sus
potencialidades. Atentamente,
Juan Jesús Ignacio del Río
Patólogo del Hospital Virgen de la Luz