Factura rebajada un 25%

ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: ......

DOMENICO GRECO Pintor del alma.

"Mi nombre pasará a la posteridad como el de uno de los grandes genios de la pintura"...

Dicen que era un hermoso día de primavera y la luz del sol reverberaba sobre las piedras, dando nuevo colorido a árboles y flores. Sin embargo, en el estudio de El Greco reinaba una una oscuridad absoluta. Cuando un amigo fue a verle para invitarle a dar un paseo, las cortinas estaban echadas y no había ninguna luz encendida...

...
El pintor rechazó la invitación, respondiendo: "No; el sol se interpondría con la luz que brilla en mi interior".
Es ésta una anecdota reveladora de que El Greco fue un hombre de profundos sentimientos religiosos, que vivía mucho tiempo solo y encerrado en sí mismo...

...
De su diario batallar por comprender y expresar sus sentimientos surgió su original estilo: los rostros y los cuerpos que pintaba están extrañamente alargados. Esta distorsión es una evasión del realismo, ingeniosa y estudiada, la cual produce en sus cuadros un tremendo impacto emocional. Dicen los entendidos, que nadie ha pintado jamás a la manera de El Greco...

...
Algunos estudiosos de su obra han encontrado otra explicación distinta para esa anomalía. Dos eminentes oculistas afirmaron que El Greco pintaba con su peculiar estilo porque padecía de miopía y de astigmatismo. Otro afirmó que el estrabismo sólo le permitía hacer uso del ojo izquierdo. Estos razonamientos se aceptaron sin reparo hasta que un cuarto oculista se tomó la molestia de examinar un cuadro de El Geco a través de los Rayos X y descubrió que bajo los alargados torsos, brazos y piernas se ocultaban unos cuerpos de proporciones normales. De esta menera probó que las distorsiones eran deliberadas, y en modo alguno el resultado de algún defecto en la vista del pintor...

...
Algunos críticos de su primera etapa como pintor, le llamaron demente y uno le calificó de morfinómano; ambas acusaciones, evidentemente eran falsas. Basta con estudiar la calidad cerebral de sus lienzos, su cuidada composición, par darse cuenta de que no pueden ser la obra de un demente...

...
El Greco siempre pintaba con parsimonia, creando una composición sólida, la cual es propia de un hombre que además era arquitecto.
Se sabe que guardaba en un armario cien extraños maniquíes que él mismo había confeccionado de arcilla, yeso y cera, y cuando empezaba un lienzo solía agruparlos para formar un modelo del cuadro. Su colorido, a menudo fantástico, la extraña juxtaposición de amarillos, rosas y verdes fuertes eran, por una parte, producto de su deseo de dar contenido dramático a este mencionado impacto emocional, y por otra, resultado de la costumbre del artista, al que le gustaba trabajar con luz artificial, o bien con luz del sol velada por cortinajes...

...
El Greco, indudablemente uno de nuestros más gloriosos pintores, fue ignorado y olvidado hasta casi trescientos años después de su muerte. En fecha tan tardía como 1902 se publicó un libro de arte, aparentemente autorizado, de casi setecientas páginas, en el que ni siquiera se cita su nombre...

...
Su rehabilitación comenzó a finales del siglo XIX y comienzos del XX. El mundo del arte pasaba por un momento de rebelión contra la pintura tradicional. Cézanne, Monet y otros artistas luchaban por la libertad en el empleo de la luz, la forma y el color. Estos rebeldes descubrieron en El Greco a un pintor tan lozano y moderno como el mejor de los representantes de la escuela de París....

...
Fue un milagro, una verdadera resurrección, la manera en que este pintor pasó del anonimato a la fama mundial. Los marchantes de arte y los coleccionistas invadieron Toledo para revolver desvanes y sótanos...

...
Los curas de las pequeñas iglesias y los propietarios particulares, que nunca habían considerado importante tener nada de El Greco, llegaron a la conclusión de que estos incansables compradores estaban un poco chiflados. No obstante, aceptaban gustosamente su dinero, y vendieron auténticas obras maestras por cantidades ridículamente insignificantes...

...
El cuadro titulado "Retrato del cardenal Don Fernando Niño de Guevara", que fue adquirido a precio de ganga, se vendió más tarde por una importante suma, y hoy su valor es casi incalculable.
El hecho de que hubiesen desaparecido tantas de sus pinturas estimulaba el apetito de los coleccionistas. A mediados del siglo XX, "los grecos" conocidos no llegaban a trescientos, sin embargo, siete años después de la muerte del artista, su hijo hizo un inventario de 241 cuadros que obraban en su poder, de muchos de los cuales se desconoce el paradero. Nadie sabe dónde están los cuadros que faltaban ni lo que fue de ellos, y nadie sabe tampoco el número de los que se perdieron...

...
Se publicaron innumerables libros y folletos, que el público devoraba ávidamente, acerca de este artista del siglo XVI, que constituyó la revelación del siglo XX; sin embargo, la figura misma del pintor seguía siendo un misterio...

...
El Greco no llevó un diario, ni tampoco escribió muchas cartas. Lo que de él sabemos ha sido descubierto gracias a documentos muy desperdigados, y es tan sólo un bosquejo; a mediados del siglo XX, las preguntas básicas todavía no han tenido respuesta, y quizá sigan en pie para siempre, burlando nuestra curiosidad...

...
El pintor nació en candia, en la isla griega de Creta, en 1541, y fue bautizado con el nombre de Domenico Theotokoulos. Asistió a la escuela del monasterio de Santa Catalina, que guardaba un relicario en el Monte Sinaí, y se dice que sus primeros dibujos, hoy desaparecidos, representaban aquel santo lugar....

...
A los dieciocho años era ya un pintor prometedor, y fue entonces cuando se trasladó a Venecia y allí, según muchos eruditos, trabajó en el taller de Tiziano, aprendiendo muchas artes, principalmente la técnica del color. Algunos años más tarde partió para Roma, donde no tardó en chocar con el dictador artístico de la ciudad, Miguel Ángel...

...
Los santos padres habían pedido a Miguel Angel que vistiera algunas de las figuras de su "Juicio Final". Durante la controversia que se produjo como resultado de aquello, El Greco declaró: "Destruid toda la obra y dejar que yo haga otra; haré una obra que sea decorosa y honesta y no inferior a ésta en cuanto a pintura". En el mundo artístico de Roma, las esperanzas de que El Greco pudiera obtener algún encargo se desvanecieron...

...
En la primavera de 1577 ya se encontraba en Toledo, la bellísima ciudad española. Había conseguido un encargo en la nueva iglesia de Santo Domingo el Antiguo. Para llegar a comprender a El Greco es necesario apreciar en su justa medida las cualidades de la antigua ciudad y el misterio de la gran influencia que ejercía sobre él como pintor...

...
Cuando llegó a Toledo, a la edad de terinta y seis años, El Greco era poco más que un buen artesano, es decir, un artista de segunda fila. En menos de cinco años se había convertido en un gran pintor...

...
Toledo había obrado un milagro. "Creta le dió la vida -escribió Paravicino-, y los pinceles Toledo". Fue una ciudad a la que se adaptaba su espíritu y le proporcionaba un ambiente en el que su alma de pintor cobraba vida y fecundidad. En el aire flotaba una chispa que incendió el espíritu del artista...

...
Su ardiente pasión por la ciudad se hizo patente en su cuadro "Vista de Toledo", un sueño fantástico de argamasa y piedras de la ciudad, pero un sueño auténtico en espíritu, más auténticamente Toledo que Toledo mismo...

...
Durante los treinta y siete años que vivió allí ocupó tres casas distintas. La mayor parte del tiempo vivió en la que había de morir, una hermosa mansión de veinticuatro habitaciones. La mujer que llenó su vida fue Doña Jerónima de las Cuevas, cuya belleza puede apreciarse en el cuadro que según muchos estudiosos la representa, el titulado "La Dama del Armiño...

...
¿Era su esposa esta dama? No se sabe con certeza. Uno de sus biógrafos apuntó que la única razón por la que el pintor no legalizó la unión fue porque ya tenía esposa en Italia. Doña Jerónima le dió un hijo, Jorge Manuel, que también fue pintor y trabajó siempre al lado de su padre...

...
En "El entierro del Conde de Orgaz" se ve un primer plano a un niño que lleva un pañuelo blanco en el que se lee, en griego, el nombre del pintor, las palabras "Yo lo hice" y el año de nacimiento de Jorge Manuel...

...
En la mansión vivían también una vieja ama de llaves y cocinera, su agente comercial y varios discípulos. Cuando el pintor tenía dinero, contrataba los servicios de algunos músicos que tocaban para él durante las comidas. De vez en cuando iban sus amigos, arquitectos, poetas, o eruditos a pasar con el la velada...

...
El solitario griego cautivaba a sus invitados con su ingenio y su conocimiento del mundo. Estas veladas sociales, sin embargo, no eran frecuentes. Su vida la constituían el lienzo montado sobre un caballete y la angustia de transformar en color la emoción y el pensamiento que llenaban sus horas de vigilia...

...
Los primeros cuadros importantes que pintó en España fueron dos grandes retablos. Ambos tuvieron una aceptación tan favorable que pronto le hicieron un encargo para que pintara otro retablo en la sacristía de la enorme catedral de Toledo. El tema fue "La Expoliación de Jesucristo", y resultó una obra maestra, alejada de la serenidad tradicional de los italianos...

...
Sin embargo, su pintura resultó demasiado viril y original para los padres de la iglesia, que no sólo rehusaron aceptarla, sino que se negaron además a pagar. El Greco puso un pleito para cobrar el dinero que se le debía, y entonces se celebró el histórico juicio en el que los testigos de ambas partes estaban divididos por igual. Durante el juicio, El Greco permaneció callado, con la cabeza erguida orgullosamente en señal de desprecio por los comentarios de sus críticos....

...
Cuando el juez le preguntó por qué había veniso a Toledo, replicó que se negaba a contestar. A la pregunta de cuál era su nombre, sólo contestó cuando le amenazaron con el encarcelamiento. Al final se avino a aceptar un tercio del precio convenido originalmente...

...
El artista se reservó la palabra final en la disputa. Copió "La Expoliación de Jesucristo" nada menos que diecisiete veces, vendió las variantes a particulares e iglesias, sacando así provecho de su infortunio. La confección y venta de copias de cuadros propios era una práctica común en aquellos días, y El Greco lo hizo a menudo...
Respuestas ya existentes para el anterior mensaje:
...
Vendió ochenta veces su San Francisco en éxtasis. El pintor, que fue un rebelde
en muchos aspectos, contribuyó a hacer desaparecer un impuesto que sobre sus propias obras tenían que pagar los pintores.
El Greco no se engañaba respecto a sus propios méritos. "Con la misma certeza que el pago de mi sublime obra es inferior a su valor -dijo-, mi nombre pasará a la posteridad como el de uno de los grandes genios de la pintura"...