Los amores de un escritor con "la mejor ciudad del mundo".
John Gunther se enamoró - según dijo-, de Londres, a las cuatro de la tarde de un día de primavera del año 1922, cuando era un estudiante que visitaba por primera vez Europa, y su cariño no varió con los años...
John Gunther se enamoró - según dijo-, de Londres, a las cuatro de la tarde de un día de primavera del año 1922, cuando era un estudiante que visitaba por primera vez Europa, y su cariño no varió con los años...
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Decía que no era tan vieja como Roma, ni tan luminosa como París, ni tan espectacular como Nueva York, ni tan gigantesca como Tokio;...
Decía que no era tan vieja como Roma, ni tan luminosa como París, ni tan espectacular como Nueva York, ni tan gigantesca como Tokio;...
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pero, "Para mi gusto, -decía-, es la ciudad más bonita del mundo"...
pero, "Para mi gusto, -decía-, es la ciudad más bonita del mundo"...
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Londres tiene toda suerte de cualidades negativas, como el clima (se ha visto alguna vez a un típico londinense del West End sin paraguas?), sus provincianismos, (como la tempranísima hora del cierre de los "pubs" o tabernas) y su arcaica preocupación por las clases sociales, incluso en las "más bajas" (no hay en el mundo nadie más "snob" que un "cockney)...
Londres tiene toda suerte de cualidades negativas, como el clima (se ha visto alguna vez a un típico londinense del West End sin paraguas?), sus provincianismos, (como la tempranísima hora del cierre de los "pubs" o tabernas) y su arcaica preocupación por las clases sociales, incluso en las "más bajas" (no hay en el mundo nadie más "snob" que un "cockney)...
