Buenas tardes Vuctoria. Buen día también en Barcelona; ahora acabo de subir de la calle, de dar un paseo con mi nieto, y bien tapaditos, se está la mar de bien. Tan a gusto estaba Aitor que se ha quedado dormido, así que dormido estará hasta la seis, que es la hora de la merienda.
Un beso y feliz tarde.
Un beso y feliz tarde.