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-El mucho hablar envilece, y el mucho rascar escuece.
Se dice como aviso y consejo a los que hablan mucho.
-El mucho hablar envilece, y el mucho rascar escuece.
Se dice como aviso y consejo a los que hablan mucho.
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-Con la cuchara que elijas, con esa comerás.
Aconseja estar sobreaviso para elegir bien aquello de que nos vamos a aprovechar.
-Con la cuchara que elijas, con esa comerás.
Aconseja estar sobreaviso para elegir bien aquello de que nos vamos a aprovechar.
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-Antes de la hora, gran denuedo; venidos al punto, mucho miedo.
Indica lo valientes que son algunas personas, sólo de boca, porqur cuando se trata de demostrarlo con hechos, todo es excusa.
-Antes de la hora, gran denuedo; venidos al punto, mucho miedo.
Indica lo valientes que son algunas personas, sólo de boca, porqur cuando se trata de demostrarlo con hechos, todo es excusa.
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- ¡Ojo al Cristo, que es de plata!
Advierte que se tenga cuidado con una cosa, a la que se estima mucho, por el peligro que puede correr.
- ¡Ojo al Cristo, que es de plata!
Advierte que se tenga cuidado con una cosa, a la que se estima mucho, por el peligro que puede correr.
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-Las campanas grandes dan grandes campanadas, pero no siempre tocan a fiesta.
Indica que las personas importantes, aunque siempre hagan cosas relevantes no se deduce que éstas sean buenas.
-Las campanas grandes dan grandes campanadas, pero no siempre tocan a fiesta.
Indica que las personas importantes, aunque siempre hagan cosas relevantes no se deduce que éstas sean buenas.
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-Las cañas se vuelven lanzas.
Se dice cuando lo que empieza por ser un juego y broma, acaba convirtiéndose en enfado y disgusto.
-Las cañas se vuelven lanzas.
Se dice cuando lo que empieza por ser un juego y broma, acaba convirtiéndose en enfado y disgusto.
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-Ojo al dinero, que es el amor verdadero.
Recomienda no malgastar el dinero, sino cuidar de él y estimarlo.
-Ojo al dinero, que es el amor verdadero.
Recomienda no malgastar el dinero, sino cuidar de él y estimarlo.