No hace muchos días terminé de leer un libro que me prestó mi suegra titulado La Papisa, que escribió Paul Murphy y R. René Arlington y que más tarde fue llevado a la pantalla.
Se trata de la biografía de la mujer que más influencia y poder haya tenido nunca en toda la historia de la Santa Sede...
Se trata de la biografía de la mujer que más influencia y poder haya tenido nunca en toda la historia de la Santa Sede...
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La biografía de Pascualina, o "La Papisa", mujer excepcional, es un trozo palpitante de un tiempo, una crónica vigorosa que incluye todos los sucesos importantes que se desarrollaron en el curso de los años, vistos desde El Vaticano y de los que muy pocas personas tuvieron conocimiento....
La biografía de Pascualina, o "La Papisa", mujer excepcional, es un trozo palpitante de un tiempo, una crónica vigorosa que incluye todos los sucesos importantes que se desarrollaron en el curso de los años, vistos desde El Vaticano y de los que muy pocas personas tuvieron conocimiento....
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Esta obra minuciosa y admirable también trata del papel que tuvo el Estado del Vaticano en los acontecimientos antes citados. De este papel, y de las interioridades del mismo, para completar el cuadro...
Esta obra minuciosa y admirable también trata del papel que tuvo el Estado del Vaticano en los acontecimientos antes citados. De este papel, y de las interioridades del mismo, para completar el cuadro...
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Volvamos a Sor Pascualina para decir de ella que hasta los mismos cardenales la consideraban "el único hombre de verdad que existe en el Vaticano". Enérgica y decidida, pasó más de trinta años junto a Pío XXII, de que fue secretaria y consejera, ama de llaves y confidente, firme revulsivo, llegado el caso de un Papa que -según decían-, se veía dominado por la indecisión...
Volvamos a Sor Pascualina para decir de ella que hasta los mismos cardenales la consideraban "el único hombre de verdad que existe en el Vaticano". Enérgica y decidida, pasó más de trinta años junto a Pío XXII, de que fue secretaria y consejera, ama de llaves y confidente, firme revulsivo, llegado el caso de un Papa que -según decían-, se veía dominado por la indecisión...
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Sor Pascualina fue testigo priviligiado, protagonista en muchos casos, de una época crucial en la historia de Europa: el siglo XX, con sus guerras mundiales, el auge y caída del nazismo y el fascismo, los campos de exterminio, y la reconstrucción y remodelación del continenete...
Sor Pascualina fue testigo priviligiado, protagonista en muchos casos, de una época crucial en la historia de Europa: el siglo XX, con sus guerras mundiales, el auge y caída del nazismo y el fascismo, los campos de exterminio, y la reconstrucción y remodelación del continenete...
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Uno de los autores del libro dice en su prólogo que a los 87 años seguía siendo tal como la vió en su edad madura... asombrosamente menuda y angelical, aunque de una vitalidad sorprendente y apasionanate...
Uno de los autores del libro dice en su prólogo que a los 87 años seguía siendo tal como la vió en su edad madura... asombrosamente menuda y angelical, aunque de una vitalidad sorprendente y apasionanate...
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Dice también, que parecía ser de una generación posterior a la suya, una mujer con luminosos ojos de un gris azulado, y fresca tez de tinte ruboroso; su pretendida severidad, dice Paul, revestía apenas su vanidad y se pierde en una tierna sonrisa...
Dice también, que parecía ser de una generación posterior a la suya, una mujer con luminosos ojos de un gris azulado, y fresca tez de tinte ruboroso; su pretendida severidad, dice Paul, revestía apenas su vanidad y se pierde en una tierna sonrisa...
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"A los administradores de la Iglesia les inquietaba más el ama del Papa (sor Pascualina)... que los peligros sociales cuya amenaza se cernía sobre la Humanidad" J. H. Plum.
"A los administradores de la Iglesia les inquietaba más el ama del Papa (sor Pascualina)... que los peligros sociales cuya amenaza se cernía sobre la Humanidad" J. H. Plum.
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"El 24 de julio de 1958, poco después del mediodía, sor Pascualina atravesó sigilosa las dependencias posteriores, celosamente vigiladas, del Palacio Papal vaticano, y pasó a un recóndito patio con el Santo Padre, el papa Pío XII, a su lado. Ambos se encaminaron hacia un automóvil mientras la Guardia Suiza -los leales valedores de la seguridad vaticana desde 1505-, mantenía un respetuosos silencio...
"El 24 de julio de 1958, poco después del mediodía, sor Pascualina atravesó sigilosa las dependencias posteriores, celosamente vigiladas, del Palacio Papal vaticano, y pasó a un recóndito patio con el Santo Padre, el papa Pío XII, a su lado. Ambos se encaminaron hacia un automóvil mientras la Guardia Suiza -los leales valedores de la seguridad vaticana desde 1505-, mantenía un respetuosos silencio...
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Acomodándose en el inmenso vehículo fabricado por encargo, con cortinillas corridas para protegerles de las miradas curiosas, la monja estrechó afectuosamente la mano del Papa entre las suyas. De momento ninguno habló, los dos se sintieron demasiado deprimidos para con versar...
Acomodándose en el inmenso vehículo fabricado por encargo, con cortinillas corridas para protegerles de las miradas curiosas, la monja estrechó afectuosamente la mano del Papa entre las suyas. De momento ninguno habló, los dos se sintieron demasiado deprimidos para con versar...
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Desde hacía tiempo la salud de Pío había sido una fuente de preocupaciones incesantes. Y ahora, aunque el Papa se esforzara por animar a Pascualina, la monja percibió entristecida la palidez de sus facciones. Y presintió súbitamente que, no obstante su pretendido vigor, él no vería nunca más la Ciudad Eterna...
Desde hacía tiempo la salud de Pío había sido una fuente de preocupaciones incesantes. Y ahora, aunque el Papa se esforzara por animar a Pascualina, la monja percibió entristecida la palidez de sus facciones. Y presintió súbitamente que, no obstante su pretendido vigor, él no vería nunca más la Ciudad Eterna...
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A decir verdad, esta marcha -repetida durante casi treinta años- desde su morada hacia la suntuosa residencia estival del Vaticano en Castelgandolfo, sería el último viaje que harían juntos...
A decir verdad, esta marcha -repetida durante casi treinta años- desde su morada hacia la suntuosa residencia estival del Vaticano en Castelgandolfo, sería el último viaje que harían juntos...
