¡Jolín Eufra7, qué recuerdos me has traído con esta poesía! La aprendí cuando éramos unos críos y aún la tengo fresca en la memoria... ¡Tú no sabes, cómo me sirvió esta poesía y saber cantar el Penge Lingua, para dar consuelo y calma a un triste! Era sacerdote y padecía Alzheimer y cuando a veces se enfurecia, cuando la oía recitar se calmaba para escuchar... Bueno, ya no sigo, que aquello ya se pasó. Besos y hasta otra.