¡Jolines, no hay quien pueda con ellos!
¡Heyyyyyyyyyyyyyyyyyyyy...! ¡Pero si no me había dado cuenta que estaba aquí "MI CAPERUCITA". Sí, señores. Sepan ustedes, que un 14 de agosto, en pleno "caloruzo", el marido de Rosalina, (tercero por la izquierda) fue mi caperucita... ¡Y YO SU LOBOOOOOOOOOOOOOOO! Madre mía.... ¡Y que requetebién nos quedaban los disfraces! Nunca había visto yo una caperucita más mujerona y con las trenzas más rubias... ¡Emulaban a los trigales manchegos que pisó Rocinante por esas inmensas llanuras Manchegas... ¡Y cómo bailábamos..., y qué buena pareja hacíamos...! Señor, Señor, aquello era diversión... ¡Y qué nos quiten los bailaooooooooooooooo, eh MAÑOOOOOOOOOOOOOO! JAJAJAJAJAJAJAJAJA