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-Lo que no pasa en un año, pasa en un día.
Expresión con que se recomienda a alguno no confiarse demasiado por el hecho de que nunca haya ocurrido nada. Se dice principalmente cuando se trata de algo peligroso o se está expuesto a un accidente, desgracia, etc.
-Lo que no pasa en un año, pasa en un día.
Expresión con que se recomienda a alguno no confiarse demasiado por el hecho de que nunca haya ocurrido nada. Se dice principalmente cuando se trata de algo peligroso o se está expuesto a un accidente, desgracia, etc.
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-Quien no buscó amigos en la alegría, en la desgracia no los pida.
consecuencia lógica, y a la vez exhortación a ganarse amigos en los buenos momentos.
-Quien no buscó amigos en la alegría, en la desgracia no los pida.
consecuencia lógica, y a la vez exhortación a ganarse amigos en los buenos momentos.
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-El que el incendio busca, o se quema o se chamusca.
Aconseja no exponerse a los peligros a fin de no ser víctima, de una u otra manera, de los mismos.
-El que el incendio busca, o se quema o se chamusca.
Aconseja no exponerse a los peligros a fin de no ser víctima, de una u otra manera, de los mismos.
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-Lo que no se empieza, no se acaba.
Frase con la que se reprende al perezoso que no se decide a emprender de una vez lo que tienen que hacer.
-Lo que no se empieza, no se acaba.
Frase con la que se reprende al perezoso que no se decide a emprender de una vez lo que tienen que hacer.
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-La tierra de Jauja, donde se come, se bebe y no se trabaja.
Réplica que se da a uno cuando exalta demasiado las excelencias de una tierra, dándole a entender que exagera.
-La tierra de Jauja, donde se come, se bebe y no se trabaja.
Réplica que se da a uno cuando exalta demasiado las excelencias de una tierra, dándole a entender que exagera.
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-Quien no cae, no se levanta.
A veces el incurrir en un yerro, produce un gran bien pues evita incurrir en otros.
-Quien no cae, no se levanta.
A veces el incurrir en un yerro, produce un gran bien pues evita incurrir en otros.
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-Lo que no se llevan los ladrones aparece por los rincones.
Dícese de las cosas extraviadas, que se encuentran más adelante o se confía en que se encontrarán, por el hecho de que nadie se las ha llevado.
-Lo que no se llevan los ladrones aparece por los rincones.
Dícese de las cosas extraviadas, que se encuentran más adelante o se confía en que se encontrarán, por el hecho de que nadie se las ha llevado.
