Introducción
El Camino Inglés (o Camino de los Ingleses) es el Camino de Santiago de Ferrol, o de A Coruña, a Santiago. Fue la ruta medieval de peregrinación a Compostela que seguían los devotos ingleses, y de otros lugares del norte de Europa, que llegaban en barco al puerto de A Coruña y, en menor medida, al puerto de Ferrol.
Hoy en día la iglesia compostelana sólo entrega la compostela a los peregrinos que hayan realizado un mínimo de 100 km a pie o 200 km en bicicleta. Así pues, la mayoría de peregrinos toman como punto de partida Ferrol, porque A Coruña se halla a menos de 100 km de la ciudad santa. Así mismo, debemos tener presente que las estrictas normativas de la iglesia compostelana para la entrega de la compostela nos obligan a sellar la credencial dos veces al día como mínimo.
El Camino Inglés presenta una señalización de Ferrol a Santiago muy buena, casi excelente, realizada con los tradicionales mojones de piedra con una vieira que indica la dirección, y complementada con las también tradicionales flechas amarillas. Las dos señalizaciones nunca se contradicen. Y bien podemos asegurar que es una suerte que esta ruta presente una muy buena señalización, porque en caso contrario sería del todo imposible realizar el camino debido a la gran cantidad de cruces, bifurcaciones y trifurcaciones de todo tipo que encontramos. Es Galicia...
Con respecto a la variante coruñesa, la señalización del tramo entre A Coruña y Bruma (donde confluye con el camino de Ferrol) es muy deficiente según ha denunciado públicamente la asociación gallega AGACS y otros experimentados peregrinos (año 2010), lo que convierte la salida del área urbana de la capital en un galimatías.
Tanto el recorrido desde Ferrol como desde A Coruña no presenta variantes o tramos con itinerarios alternativos.
Con respecto al paisaje, la parte más interesante son los 38 km entre Miño y Bruma, que transcurren por un territorio rural, montañoso y solitario, salpicado de pequeñas aldeas dedicadas principalmente a la ganadería. La primera parte del Camino Inglés también tiene su belleza, pero transcurre por un territorio con numerosas infraestructuras viarias y con grandes instalaciones vinculadas a la industria marítima y militar. La última parte del camino, de Bruma a Santiago, avanza en gran parte por caminos rurales en un entorno sereno y con suaves desniveles.
El Camino Inglés (o Camino de los Ingleses) es el Camino de Santiago de Ferrol, o de A Coruña, a Santiago. Fue la ruta medieval de peregrinación a Compostela que seguían los devotos ingleses, y de otros lugares del norte de Europa, que llegaban en barco al puerto de A Coruña y, en menor medida, al puerto de Ferrol.
Hoy en día la iglesia compostelana sólo entrega la compostela a los peregrinos que hayan realizado un mínimo de 100 km a pie o 200 km en bicicleta. Así pues, la mayoría de peregrinos toman como punto de partida Ferrol, porque A Coruña se halla a menos de 100 km de la ciudad santa. Así mismo, debemos tener presente que las estrictas normativas de la iglesia compostelana para la entrega de la compostela nos obligan a sellar la credencial dos veces al día como mínimo.
El Camino Inglés presenta una señalización de Ferrol a Santiago muy buena, casi excelente, realizada con los tradicionales mojones de piedra con una vieira que indica la dirección, y complementada con las también tradicionales flechas amarillas. Las dos señalizaciones nunca se contradicen. Y bien podemos asegurar que es una suerte que esta ruta presente una muy buena señalización, porque en caso contrario sería del todo imposible realizar el camino debido a la gran cantidad de cruces, bifurcaciones y trifurcaciones de todo tipo que encontramos. Es Galicia...
Con respecto a la variante coruñesa, la señalización del tramo entre A Coruña y Bruma (donde confluye con el camino de Ferrol) es muy deficiente según ha denunciado públicamente la asociación gallega AGACS y otros experimentados peregrinos (año 2010), lo que convierte la salida del área urbana de la capital en un galimatías.
Tanto el recorrido desde Ferrol como desde A Coruña no presenta variantes o tramos con itinerarios alternativos.
Con respecto al paisaje, la parte más interesante son los 38 km entre Miño y Bruma, que transcurren por un territorio rural, montañoso y solitario, salpicado de pequeñas aldeas dedicadas principalmente a la ganadería. La primera parte del Camino Inglés también tiene su belleza, pero transcurre por un territorio con numerosas infraestructuras viarias y con grandes instalaciones vinculadas a la industria marítima y militar. La última parte del camino, de Bruma a Santiago, avanza en gran parte por caminos rurales en un entorno sereno y con suaves desniveles.