Un gallego sale del país en busca de un mejor futuro, pero pronto su padre empieza a extrañarlo, así que le manda un correo electrónico.
—NECESITO VERTE. VOY O VIENES?
El hijo responde inmediatamente el correo con un lacónico:
—SI...
El padre no entiende y manda otro mensaje:
—SI... ¿QUE?
La contestación del hijo es inmediata:
—SI SEÑOR...!
—NECESITO VERTE. VOY O VIENES?
El hijo responde inmediatamente el correo con un lacónico:
—SI...
El padre no entiende y manda otro mensaje:
—SI... ¿QUE?
La contestación del hijo es inmediata:
—SI SEÑOR...!