DECÁLOGO DEL COMPORTAMIENTO CIUDADANO ANTE LA PRESENCIA DE UN PERRO-GUÍA.
No me des de comer ni me llames cuando estoy trabajando. Los silbidos me distraen.
Si quieres saludarme pregunta primero a la persona.
No dejes tu perro suelto cerca de mi. Intenta controlarle.
Para dar una indicación a mi dueño, no tires de la correa ni me agarres del arnés.
Recuerda que soy los ojos de una persona. No impidas mi paso a los establecimientos ni transportes. La ley me ampara.
No me tengas miedo. Ni soy agresivo ni transmito enfermedades.
Si cuando vas conduciendo ves que intento cruzar, ten precaución y para a una distancia suficiente para no asustarme.
Facilítame una ubicación cómoda en los transportes públicos.
Somos perros limpios. El pipí y las cacas siempre lejos de las aceras en los lugares adecuados.
Si estoy trabajando, vendiendo el cupón… ¡Cómprame uno… o dos!
Gracias a la gran labor social de ONCE más de mil perros guía conducen a personas ciegas por nuestras calles de forma más segura y autónoma.
No me des de comer ni me llames cuando estoy trabajando. Los silbidos me distraen.
Si quieres saludarme pregunta primero a la persona.
No dejes tu perro suelto cerca de mi. Intenta controlarle.
Para dar una indicación a mi dueño, no tires de la correa ni me agarres del arnés.
Recuerda que soy los ojos de una persona. No impidas mi paso a los establecimientos ni transportes. La ley me ampara.
No me tengas miedo. Ni soy agresivo ni transmito enfermedades.
Si cuando vas conduciendo ves que intento cruzar, ten precaución y para a una distancia suficiente para no asustarme.
Facilítame una ubicación cómoda en los transportes públicos.
Somos perros limpios. El pipí y las cacas siempre lejos de las aceras en los lugares adecuados.
Si estoy trabajando, vendiendo el cupón… ¡Cómprame uno… o dos!
Gracias a la gran labor social de ONCE más de mil perros guía conducen a personas ciegas por nuestras calles de forma más segura y autónoma.