Hay quien dijo que, las grúas -plumas-, son una herramienta dotada de un simbolismo maravilloso y filosófico. También dijo que hay herramientas mentales, como son las lenguas, las costumbres, las instituciones...
A mí, como a la persona que lo dijo, que fue José Antonio Marina, me gustan las grúas ciudadanas porque suelen tener una característica fantástica: se van construyendo a sí mismas. Es decir, no necesitan otra grúa para elevar su propia estructura, cosa que les permite ser símbolo de nuestra inteligencia, que también se sube así misma.
A mí, como a la persona que lo dijo, que fue José Antonio Marina, me gustan las grúas ciudadanas porque suelen tener una característica fantástica: se van construyendo a sí mismas. Es decir, no necesitan otra grúa para elevar su propia estructura, cosa que les permite ser símbolo de nuestra inteligencia, que también se sube así misma.
José Antonio Marina decía algo así como que los seres humanos sentimos un afán de ascender, de superarnos, y que; "de los tres grandes deseos cuyo cumplimiento constituye la felicidad -el bienestar, la vinculación afectiva, y la ampliación de posibilidades, este último es el específicamente humano.
Desde hace siglos, los grandes analistas del alma ya reconocieron este imparable deseo, siendo Séneca el que elogió a los esforzados hombres que "en sí propios hallaron el ímpetu y subieron en hombros de sí mismos"...
Desde hace siglos, los grandes analistas del alma ya reconocieron este imparable deseo, siendo Séneca el que elogió a los esforzados hombres que "en sí propios hallaron el ímpetu y subieron en hombros de sí mismos"...
