"UNA NOVELA MUY CORTA" la escribió V. M. Garshin y comienza así:
"Frío, hielo... Ha llegado enero y tortura a los pobres individuos que no pueden poner a salvo sus narices en un lugar seguro y caliente; a los porteros, a los policías... También a mí me tortura su helado soplo. Desde luego, tengo un cuarto caliente, pero la fantasía me persigue y me obliga a abandonarlo...
En realidad, ¿por qué motivo ha de vagar por el muelle desierto? Los faroles de cuatro brazos arden con brillantez, a pesar de que el viento agita la llama del gas y la hace danzar. La luz oscilante tiñe la oscura masa del magnífico palacio, y de un modo especial sus ventanas, en una negrura aún más profunda. En los grandes cristales se refleja la tormenta de nieve y la gran oscuridad. El viento gime y ruge sobre el helado desierto de Neva...
"Frío, hielo... Ha llegado enero y tortura a los pobres individuos que no pueden poner a salvo sus narices en un lugar seguro y caliente; a los porteros, a los policías... También a mí me tortura su helado soplo. Desde luego, tengo un cuarto caliente, pero la fantasía me persigue y me obliga a abandonarlo...
En realidad, ¿por qué motivo ha de vagar por el muelle desierto? Los faroles de cuatro brazos arden con brillantez, a pesar de que el viento agita la llama del gas y la hace danzar. La luz oscilante tiñe la oscura masa del magnífico palacio, y de un modo especial sus ventanas, en una negrura aún más profunda. En los grandes cristales se refleja la tormenta de nieve y la gran oscuridad. El viento gime y ruge sobre el helado desierto de Neva...