Se trata de un deporte 'de contacto' cuyo objetivo es derribar al oponente, golpeando con fuerza, están permitidos los puñetazos, las patadas o las llaves, se prohibe la estocada, el golpe vertical en la columna o los pies y también los directos a la nuca. Los duelos se deciden por puntos, premiando no sólo la fuerza sino también la técnica.