Durante la Guerra Civil este cuadro, junto con otros del Museo del Prado, fue sometido a sucesivos traslados y finalmente fue sacado de España y trasladado a Ginebra. En ese traslado se deterioraron algunos fragmentos, como puede observarse en las faltas cubiertas de marrón a la izquierda del cuadro. Se cuenta que el camión que transportaba el lienzo rozó un balcón que caía bajo el ataque de la artillería nacional en el paso del convoy por Benicarló en su traslado entre Valencia a Barcelona. Dado que la pintura se trasladaba en su bastidor (no enrollada), sufrió el impacto y se desgarró. En 2008 las zonas afectadas fueron restauradas y las figuras desaparecidas reintegradas con pigmentos a la acuarela, tomando como modelo fotografías previas a las pérdidas. 3 En los estudios publicados tras la restauración se confirmó que antiguamente la obra había mostrado la inscripción «2 de mayo» en el cielo, añadida posiblemente cuando permanecía almacenada en el siglo XIX y que fue eliminada con disolventes antes de 1890.