Algunos de los más destacados pintores, arquitectos o cineastas del último siglo parecen haber estado implicados en una trama cuyo imprevisible desenlace abruma al protagonista. La supervivencia de la Iglesia, la coherencia de la Historia del Arte y hasta el futuro del Estado español parecen pender de unos hilos invisibles que algunos oscu-ros personajes manejan desde la sombra.