ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Lámparas solares y camas de bronceado. La radiación...

Lámparas solares y camas de bronceado. La radiación ultravioleta que proviene de fuentes artificiales, como las lámparas solares y las camas de bronceado, pueden causar daño a la piel y melanoma. Los proveedores de servicios médicos recomiendan enfáticamente que, especialmente los jóvenes, se evite el uso de lámparas solares y de camas de bronceado. El riesgo de cáncer de piel aumenta notablemente con el uso de lámparas solares y camas de bronceado antes de los 30 años de edad.
Antecedentes personales. Las personas que han tenido melanoma tienen un mayor riesgo de presentar otros melanomas.
Antecedentes de familia. El melanoma ocurre algunas veces en las familias. Quienes tienen dos o más familiares cercanos (madre, padre, hermana, hermano o hijo) con melanoma tienen una mayor posibilidad de presentar melanoma. En raros casos, los miembros de una familia presentarán un trastorno hereditario, como xerodermia pigmentosa, el cual hace que la piel sea sensible en extremo al sol y aumenta notablemente la posibilidad de presentar melanoma.
Piel que se quema con facilidad. Las personas de piel clara que se quema con facilidad al exponerse al sol, de ojos azules o grises, de pelo rojo o rubio, o que presentan muchas pecas tienen una mayor posibilidad de presentar melanoma.
Algunos padecimientos médicos o medicinas. Los padecimientos médicos o medicinas (tales como algunos antibióticos, hormonas o antidepresivos) que hacen que la piel sea más sensible al sol o que suprime el sistema inmunitario aumentan la posibilidad de presentar melanoma.