El jefe reprende a un empleado impuntual:
-Además de no hacer bien su trabajo, se permite llegar dos horas tarde a la oficina. Si yo fuera usted, ni siquiera me habría molestado en venir.
-Eso habría hecho usted -respondió el empleado-, pero yo tengo un alto sentido del deber.
-Además de no hacer bien su trabajo, se permite llegar dos horas tarde a la oficina. Si yo fuera usted, ni siquiera me habría molestado en venir.
-Eso habría hecho usted -respondió el empleado-, pero yo tengo un alto sentido del deber.