Para mantener en tu mujer la sensación de estar protegida y para preservar el orgullo de tu marido, lo mejor que puede hacer un o una infiel es llenarse la boca de esponja, cubrirla con cinta de embalar ultra gruesa, y por las dudas luego enyesarse la mandíbula inferior. Habrá que alimentarse con una sonda nasogástrica, pero al menos no habrán confesado.
Como dijo Tales de Mileto allá por el año 540 a. C.: "Muchas palabras nunca indican mucha sabiduría". Johann Wolfgang Goeth escribió en 1800: "Apenas se habla y ya se está uno equivocando". Por lo tanto, es mejor callar.
(Cariño, no es lo que parece) Ana Von Rebeur
Como dijo Tales de Mileto allá por el año 540 a. C.: "Muchas palabras nunca indican mucha sabiduría". Johann Wolfgang Goeth escribió en 1800: "Apenas se habla y ya se está uno equivocando". Por lo tanto, es mejor callar.
(Cariño, no es lo que parece) Ana Von Rebeur