ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: — ¡Cuac, cuac! —dijo la mamá pata, y todos los patitos...
— ¡Cuac, cuac! —dijo la mamá pata, y todos los patitos se apresuraron a salir tan rápido como pudieron, dedicándose enseguida a escudriñar entre las verdes hojas. La mamá los dejó hacer, pues el verde es muy bueno para los ojos.