Un día se reunieron para hallar el medio de hacerla callar.
El leopardo incluso llegó a decir:
—No eres tan maravillosa como crees, reina jirafa.
Hay muchas cosas que tú no puedes hacer y nosotros sí podemos.
— ¡A ver, dime una! —contestó la jirafa.
—Pues correr tan velozmente como yo —dijo el leopardo.
El leopardo incluso llegó a decir:
—No eres tan maravillosa como crees, reina jirafa.
Hay muchas cosas que tú no puedes hacer y nosotros sí podemos.
— ¡A ver, dime una! —contestó la jirafa.
—Pues correr tan velozmente como yo —dijo el leopardo.