ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Muchas gracias -repuso el estudiante-. Démelo a cambio...
Muchas gracias -repuso el estudiante-. Démelo a cambio del queso. Puedo comerpan solo; pero sería pecado destrozar este libro. Es usted un hombre espléndido, un hombre práctico, pero lo que es de poesía, entiende menos que esa cuba.