Ofertas de luz y gas

ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: — ¡Ahí debe de estar el dragón! —gritó León. Y así...

— ¡Ahí debe de estar el dragón! —gritó León. Y así era, allí estaba el monstruo, disfrutando su siestecita matinal.

Mientras volaban sobre él, el dragón se despertó con un pavoroso rugido y se abalanzó sobre Pegaso