- ¡Da por terminada tu pobreza desde hoy! – exclamó el rey-. Te daré tantas riquezas que no tendrás que envidiar nada a tu rico hermano.
El naboY dicho y hecho, hizo entregar al soldado-labrador tierras, caballos, bueyes, herramientas de labranza, rebaños de ovejas y un cofre que contenía monedas de oro.
El naboY dicho y hecho, hizo entregar al soldado-labrador tierras, caballos, bueyes, herramientas de labranza, rebaños de ovejas y un cofre que contenía monedas de oro.