Lily y el canguro
En la mañana del tercer día que pasaba Lily en el bosque, el sol apareció todo dorado y teñido de carmesí sobre un mundo luminoso, fresco y perfumado. Cantaban los grillos, las ranas croaban y los pájaros trinaban. Quizá entre las aves se encontraba el aguzanieves, que conocía el camino de regreso a la casa de Lily.
En la mañana del tercer día que pasaba Lily en el bosque, el sol apareció todo dorado y teñido de carmesí sobre un mundo luminoso, fresco y perfumado. Cantaban los grillos, las ranas croaban y los pájaros trinaban. Quizá entre las aves se encontraba el aguzanieves, que conocía el camino de regreso a la casa de Lily.