ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Después de un rato, trepó al galeón. Era del tamaño...

Después de un rato, trepó al galeón. Era del tamaño de una cuna y se veía obligado a sacar los brazos y las piernas por el borde. El viento y la corriente del agua lo llevaron a través del océano. Arrullado por el suave movimiento del galeón, Gulliver cayó en un profundo sueño.