* A JESÚS NAZARENO
En la Capilla de Jesús
de la iglesia del Convento,
abre las puertas, Señor,
que, de rodillas, te pido
que me des tu bendición.
Ya se abren todas las puertas
de nuestro convento chiquito,
que va a salir a la calle
Nuestro Señor Jesucristo.
Ya repican las campanas
y Jesús saliendo está,
a las seis de la mañana,
al mando del capataz,
cuando el sol ya despuntaba.
Capataz, llévalo por buen sendero,
que no se vaya a caer,
que va cargado con la cruz,
y le están sangrando los pies.
Para el paso, capataz,
con gran cuidado y esmero,
la cruz le puede dañar
en la herida que le sangra
a Jesús el Nazareno.
Costaleros, que lleváis
a Nuestro Padre Jesús,
llevadlo poquito a poco,
que, con el peso de la cruz.,
le vaya a sangrar el hombro.
En la Capilla de Jesús
de la iglesia del Convento,
abre las puertas, Señor,
que, de rodillas, te pido
que me des tu bendición.
Ya se abren todas las puertas
de nuestro convento chiquito,
que va a salir a la calle
Nuestro Señor Jesucristo.
Ya repican las campanas
y Jesús saliendo está,
a las seis de la mañana,
al mando del capataz,
cuando el sol ya despuntaba.
Capataz, llévalo por buen sendero,
que no se vaya a caer,
que va cargado con la cruz,
y le están sangrando los pies.
Para el paso, capataz,
con gran cuidado y esmero,
la cruz le puede dañar
en la herida que le sangra
a Jesús el Nazareno.
Costaleros, que lleváis
a Nuestro Padre Jesús,
llevadlo poquito a poco,
que, con el peso de la cruz.,
le vaya a sangrar el hombro.