ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Su amigo no quería dejarle entrar, y Pinocho tuvo que...

Su amigo no quería dejarle entrar, y Pinocho tuvo que esperar fuera. A la media hora se abrió la puerta lentamente y apareció Palillo con un gorro igualito al de Pinocho. Durante unos instantes se quedaron en medio de la habitación en silencio. Pero luego, en vez de echarse a llorar o consolarse mutuamente, rompieron a reír. Al contar tres, se quitaron los gorros y los arrojaron al aire. Y se pusieron a hacer payasadas por la habitación, riendo y meneando sus peludas orejas.