ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: — ¿Qué va a decirme? —se preguntaba inquieto— Seguro...
— ¿Qué va a decirme? —se preguntaba inquieto— Seguro que no me perdonará. Y me estará bien empleado. Siempre prometo que voy a ser bueno y nunca lo soy. ¡Jamás seré un chico de verdad!