ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Dos Ojitos vivía feliz y en paz hasta que llegaron...

Dos Ojitos vivía feliz y en paz hasta que llegaron cierto día al castillo dos pobres mujeres pidiendo limosna. Dos Ojitos las reconoció al instante: eran sus hermanas, las cuales, a la muerte de su madre, habían caído en tal estado de miseria que tuvieron que pedir la caridad por todo el reino.