El Minotauro quedó encerrado en el centro del laberinto, de esa manera volvió la tranquilidad a Creta.
El rey Minos le encomendaba cada día más trabajo y Dédalo estaba cansado y quería irse de Creta pero el rey Minos no se lo permitía.
El rey Minos le encomendaba cada día más trabajo y Dédalo estaba cansado y quería irse de Creta pero el rey Minos no se lo permitía.