ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: Y si yo tuviera un trozo de pan,...

Y si yo tuviera un trozo de pan,
una botella de vino y el beso de una doncella,
¡qué pronto, serpiente mía, la muerte te diera!
Luego le oyó añadir:
- ¡Dios me valga, pulga!
Y desapareció