-Pobre diablo, -gritó el viejo- pronto sabrás lo que es tener miedo, porque vas a morir.
-No tan deprisa -respondió el muchacho-, que yo tendré algo que decir en eso de que voy a morir.
-Pronto acabaré contigo -dijo el demonio.
-Tómatelo con calma y no digas bravuconadas que soy tan fuerte como tú o quizá más.
-Lo comprobaremos -dijo el viejo-. Si eres más fuerte, te dejaré ir. Ven y lo comprobaremos.
-No tan deprisa -respondió el muchacho-, que yo tendré algo que decir en eso de que voy a morir.
-Pronto acabaré contigo -dijo el demonio.
-Tómatelo con calma y no digas bravuconadas que soy tan fuerte como tú o quizá más.
-Lo comprobaremos -dijo el viejo-. Si eres más fuerte, te dejaré ir. Ven y lo comprobaremos.