ALCONCHEL DE LA ESTRELLA: - ¡Ah, pícara! ¿Qué es esto que oigo? ¡Así que has...

- ¡Ah, pícara! ¿Qué es esto que oigo? ¡Así que has estado engañándome todo este tiempo! ¿eh? Yo creía que te tenía bien guardada y tú estabas recibiendo al Príncipe. Bien todavía es tiempo de cortar por lo sano.
Tomó unas tijeras y cortó las hermosas trenzas de Rapunzel. Luego la agarró de la mano y, por arte de encantamiento, la hizo volar con ella por los aires y la dejó abandonada en lo más espeso del bosque.