Todas las variedades de coloridos más o menos sofisticados muestran, en general, idénticas características físicas y de comportamiento que el tipo básico o clásico siamés. La obtención de cada una de las formas puede conseguirse mediante cruzamlentos dirigidos entre ejemplares de colores distintos o similares. Los lilas, por ejemplo, se obtienen de padres 'chocolate', pero otros tipos tienen aportes de sangre de europeos que, sin embargo, no atenúan ni enmascaran las líneas maestras del 'estándar' siamés.