Carácter y comportamiento
Muy limpios, cuidadosos y pendientes de su propio acicalamiento, se muestran cariñosos con sus dueños, pero adustos y altivos con los extraños. Los ejemplares que no estén castrados pueden convertir las frecuentes épocas de celo en una auténtica tortura para todos sus propietarios y vecinos más cercanos.
Muy limpios, cuidadosos y pendientes de su propio acicalamiento, se muestran cariñosos con sus dueños, pero adustos y altivos con los extraños. Los ejemplares que no estén castrados pueden convertir las frecuentes épocas de celo en una auténtica tortura para todos sus propietarios y vecinos más cercanos.