Esta tarea, más difícil de lo que a simple vista pudiera parecer, requiere la utilización de presas vivas, roedores y aves, previamente criados en cautividad, que son ofrecidos a los ejemplares 'en recuperación' hasta lograr que los capturen con su esfuerzo. Las aves que pueden reintegrarse a la vida libre son anilladas para poder realizar posteriores estudios. Aquellos animales menos afortunados que deben permanecer cautivos servirán para intentos de reproduccion en cautividad a fin de conservar estas fortalezas volantes sobre los cielos de los reductos silvestres.